Director: John Carney
Un film que muestra la influencia de Duran Duran en la vida de los adolescentes de los 80.
Conor, un irlandés de 15 años de edad interpretado por Ferdia Walsh-Peelo, se resiste a la difícil realidad que le imponen la recesión económica y los problemas familiares recurriendo a la estética new romantic para expresar su música. Una especie de escapismo pop. Pero Raphina −la modelo que pretende Conor− lo convence de que sea feliz de todas formas, incluso dentro de la dura situación que le toca vivir. Así que deja de lado el neorromanticismo para experimentar el sonido dark bajo el lema “tristeza feliz”. En ese momento de la película irrumpe el videoclip Gold de la agrupación inglesa Spandau Ballet, que significa el regreso al movimiento new romantic. Conor no acepta el futuro que le ofrece Irlanda y parte ilegalmente a Londres, junto con Raphina, para concretar sus sueños.
